Agosto. El reciente mes estuvo cargado de lluvia y nieve en distintas zonas del país. Dulce en el aumento de las reservas hídricas y amargo en la pérdida de plantas y estructuras de techo caídas por la nieve, prima el alivio de contar con más agua la próxima temporada.

El reciente mes sorprendió con lluvias y nieve en la capital, logrando cambiar el estado de los embalses en distintas zonas del país, en comparación a la situación que se vivió el año pasado. Desde el año 2012, la escasez de precipitaciones ha ido en aumento, principalmente en la zona centro, lugar clave del desarrollo de diversos frutales producidos en el país, lo que ha generado incertidumbre en la disponibilidad del recurso y pérdida de competitividad debido a que un riego adecuado es clave para la producción de fruta de calidad en los huertos.
La DGA (Dirección General de Aguas) monitorea el estado de los embalses en las distintas regiones del país. El último reporte emitido en julio entrega información sobre el aumento de las reservas hídricas, donde se logró un stock total de 4.531 millones de m3 de agua (año pasado a la misma fecha 3.672 millones de m3), lo que significa una un aumento del 23% respecto a julio 2021.
En la Macrozona Norte (Arica y Parinacota a Coquimbo) el total acumulado es de 300 Millones de m3, siendo el embalse Conchi, ubicado en la cuenca del río Loa, el que presenta mayor porcentaje de ocupación con 74%.
Macrozona Centro (Valparaíso a Maule) el total acumulado es de 2.413 Millones de m3, siendo el embalse Convento Viejo, en la región de O’Higgins, el con mayor porcentaje de ocupación con un 90%, y cuyo uso principal es el riego. En la región de Valparaíso, el embalse Los Aromos se encuentra en un 30% de ocupación respecto a su capacidad y el embalse El Yeso, de la región Metropolitana con una ocupación del 69%.
Macrozona Sur (Ñuble a Los Lagos) el total acumulado es de 1.818 Millones de m3. El embalse Ralco, ubicado en la cuenca del río Biobío, posee el mayor volumen almacenado (936,5 Millones m3) y cuyo uso principal es para generación eléctrica. Y el embalse Coihueco para riego, en Ñuble, tiene un 67% de su ocupación.
Sin duda, esta situación de aumento de los niveles de los acuíferos y reservas nivales será muy bueno para la agricultura. Sin embargo, en la otra cara de la moneda la nieve causó estragos en plantaciones que estaban con estructuras de malla, afectando principalmente cítricos y uva de mesa, lo que ha dejado una pérdida importante para la próxima temporada, las que entre las diferentes zonas podrían llegar a las 600 hectáreas con diversa intensidad de daño.